El Buscón narra las aventuras y desventuras de don Pablos, hijo de barbero y alcahueta, que en su afán de ascender en la escala social, describe los pesares y la pobreza en evidente contraposición a la opulencia de la vida cortesana de la época, revelando las mentiras, los trucos y los engaños empleados para ese fin. Todos sus actos se transforman en burla, ésta en ironía, la ironía en humor y la sátira en crítica constante hacia un universo plurifacético.
En la más pura tradición de la novela picaresca, inaugurada casi un siglo antes por La vida de Lazarillo de Tormes, El Buscón es el resultado del brillante ingenio de Francisco de Quevedo. Con su estilo conceptista, y con crudo realismo, desarma y degrada las acciones del protagonista hasta que éste último logra comprender que su suerte está marcada por el vicio, lejos de la virtud.
Esta traducción intralingüística, o adaptación, comprende todo el texto original y está acompañada por ejercicios gramaticales, de compresión y de producción escrita y oral, y por un dossier sobre el autor de la obra y sobre el Siglo de Oro.