Carlota es una chica sencilla a la que le gusta coleccionar piedras minerales. La madre la obliga a salir de vacaciones en crucero, pero el viaje se transforma en una aventura inquietante con la desaparición de Melania, una deliciosa anciana, la única persona que logra comprender a la chica. Carlota y Javier, un amigo, se improvisarán investigadores y resolverán el misterio, salvando a la anciana señora de las garras de su perseguidor. El cuento, escrito con un lenguaje simple, presenta un aparato didáctico y un dosier.